sábado, 10 de diciembre de 2011

El color de los sueños



 


Lo que importa

¿Qué decís? ¿Que es inútil? Ya lo daba por hecho.
Pero nadie se bate para sacar provecho.
No, lo noble, lo hermoso es batirse por nada.
Aunque vengáis a cientos no temblará mi espada.
Y sí, ya os reconozco. Sois mis viejos rivales.
¿La mentira? Pues toma. Los pactos inmorales,
los prejuicios, la envidia... ¿Que si firmo una tregua?
¡Jamás! Ah, la idiotez, te conozco a la legua.
Sé muy bien que esta guerra me la vais a ganar,
pero vencer no importa. Lo que importa es luchar.


Edmond Rosttand (1897). Cyrano de Bergerac. Acto quinto. Escena VII.